Calzadas, pistas forestales, carreteras, veredas y riberas de río se atraviesan en este sendero, que ofrece unas maravillosas vistas panorámicas.
La ruta comienza por el antiguo Camino de Sevilla, empedrado en su primer trecho entre acebuches y matorrales. Continúa ascendiendo sobre una masa de pinar hasta el mirador de Las Asomadillas, donde se puede contemplar el Peñón de Gibraltar y el pico Yebel Musa de Marruecos.
Dejando el mirador, se desciende por un pinar hasta el cauce del Hozgarganta. Entre cantos rodados se cruza el río por una pasada que conduce hasta la vereda de La Maestranza, que discurre aguas abajo, paralela en su margen derecha.
El sendero se encuentra en algunos tramos excavados en la arenisca, lo que denota el trasiego que tuvo este camino en tiempos no muy lejanos. La ruta llega a las ruinas de un antiguo molino y desde aquí se asciende por un camino de zahorra hasta finalizar el recorrido
Fuente: Diputación Provincial de Cádiz
Desde el mirador de las Asomadillas este sendero nos propone hermosas vistas sobre la cuenca del río Hozgarganta, las sierras del parque, el Peñón de Gibraltar y, aún más allá, África.
El itinerario comienza en una antigua vereda empedrada que comunica Jimena de la Frontera con Ubrique, de ahí su nombre. Coincide en parte de su trazado con el Sendero de Gran Recorrido GR-7. Discurre por los montes patrimoniales de Jimena de la Frontera, atravesando repoblaciones antiguas de pino piñonero, en dirección hacia el mirador Las Asomadillas. El camino se acerca hasta las orillas del río Hozgarganta, cruzándolo incluso en varias ocasiones, para discurrir por antiguas vías de saca del corcho, muy cerca del río unas veces y cogiendo altura hasta obtener unas excelentes panorámicas, en otras.
Sus aguas, no retenidas por presas ni embalses, descienden desde las estribaciones de la sierra del Aljibe entre agrestes hoces y canutos, para, llegadas al curso medio, bordear el cerro de las Asomadillas con un meandro que este sendero nos permite conocer y disfrutar desde sus orillas.
Su caudal casi continuo lo convierten en un río agreste lleno de vida. Estas circunstancias crean las condiciones idóneas para la preservación de numerosas especies de insectos, aves, anfibios y peces. Entre la numerosa fauna existente, destaca la nutria, considerada como indicador de la calidad de las aguas y de los cauces bien conservados, con arboledas y vegetación típicamente de ribera en los que este mamífero encuentra satisfechas sus condiciones más exigentes. Peces, ranas y otros animales que atrapa con su boca le sirven de alimento.
Nota: Cuando las lluvias son intensas las pasarelas se cubren de agua y no se puede atravesar el río Hozgarganta .
Fuente: Junta de Andalucía